Crítica: Se Quien Me Mató

Vaya joyita que me he tragado, una película que se asemeja a un telefilme y una mera  excusa barata para que la actriz Lindsay Lohan (más conocida por sus escándalos, que por sus películas), pueda lucirse en cada segundo del filme, bombardeándonos en todo momento con imágenes forzadas de Lindsay bailando y luciéndose para deleite de sus fans,  pero no os hagáis ilusiones, que la chica apenas enseña chicha, ni siquiera cuando practica sexo se quita el sujetador.

No me extraña demasiado que esta película haya sido la clara ganadora de los últimos premios "Razzies"(los antioscar), la cual se llevó el premio a la peor película, peor director, peor guión, peor actriz, peor remake, peor excusa para hacer una película de terror y finalmente por peor pareja en la pantalla (refiriéndose a las dos interpretaciones de la Lohan), aún sabiendo esto, decidí darle una oportunidad, pero pude comprobar con mis ojos que era totalmente merecedora de dichos premios.

Aunque los primeros minutos del filme pueden no parecer tan malos, debido principalmente a las imágenes en las que veremos a un psicópata haciendo un buen uso del hielo y de algunos cristales, poco más nos aportará esta película. En el reparto aparte de Lindsay Lohan, cuya interpretación deja mucho que desear, aunque tampoco es para ponerla a parir, como lo han puesto en más de un medios, veremos a la conocida actriz Julia Ormond (que no se como la han liado para aparecer en semejante película) haciendo de madre de la protagonista.

La cinta, que no sería de terror, más bien es un thriller con secuestros de por medio, intenta liarnos para conseguir un final impactante, pero además de ser bastante absurdo es muy predecible. Sólo la recomendaría si eres un obseso de la Linsay Lohan, aquí tendrás una sobredosis de la polémica actriz.